El actor estadounidense, quien estuvo acompañado del talento del filme, elevó la adrenalina y aceleró el pulso del público que lo tuvo cerca en un centro comercial de la Ciudad de México
Desde temprano, el concreto del Parque Toreo vibraba con el rugido de los motores de la F1. En los niveles superiores del centro comercial, los fans se agrupaban en donde podían, las banderas a cuadros ondeaban para anunciar la llegada de otro tipo de carrera: la protagonizada por Brad Pitt, Damson Idris y dirigida por Joseph Kosinski, la mente detrás de Top Gun: Maverick (2022).
La película, simplemente titulada «F1» es promocionada pero también fue filmada en nuestro país.
El evento arrancó con la conducción de la influencer Gaby CAM y de Memo Rojas, piloto mexicano que, además de subirse a podios, también se subió al escenario de este fan event.
Los asistentes —algunos con gorras del equipo ficticio APXGP, otros con camisetasde Red Bull, Ferrari o Mercedes— se entremezclaban con pequeños altares portátiles a Sergio “Checo” Pérez: funkos, monoplazas de juguete, pancartas con su rostro y hasta llantas de una vasta colección.
Para muchos, esta visita del talento no era sólo un vistazo al futuro del cine deportivo, era una excusa para rendir tributo al ídolo local.
Ayer a las 19:30 horas, los gritos se volvieron oleada. Uno a uno, el elenco descendió por una escalinata que llevaba a la alfombra negra, diseñada como una pista de F1.


El primero en aparecer fue Joseph Kosinski, seguido de Kerry Condon, Jeremy Kleiner y Damson Idris —quien ya había dejado ver su afición por la temática al llegar vestido de piloto a la Met Gala.
Entonces apareció Brad Pitt. Su saco rosa, ligeramente desgarrado por un incidente previo, lo hizo parecer más cercano, más humano.
Sin embargo, el efecto fue el mismo: lágrimas, gritos, celulares temblorosos. Hubo quienes no lograron articular palabra cuando el actor estadounidense se acercó para firmar un autógrafo o posar para una selfie, hubo incluso quienes estallaron en llanto.

“Es muy especial para nosotros, estoy emocionado de estar aquí; trabajamos en este proyecto tres años y recibir esta calidez de todos es increíble y hacerlo en Latinoamérica es especial para todos nosotros”, dijo Brad Pitt anoche sobre el entarimado.
“Fue algo realmente fácil, pero fue un trabajo que hizo el director, además de que nunca había sentido esa adrenalina de filmar en carreras reales”, agregó.
La película —coproducida por Lewis Hamilton— sigue a Sonny Hayes, un expiloto que regresa de su retiro para guiar a un novato, Joshua Pearce (Damson Idris), en el equipo APXGP.

“En una de las escenas tuvimos que cruzar la pista con toda la manada, con los coches reales. Y sí, me puse nervioso. Sentía que estaba desbordado, esperando, preguntándome: ‘¿vas a poder?’”.
Gran parte de la cinta, que se estrena el 26 de junio, fue filmada en circuitos reales como Monza, Suzuka, Las Vegas y el Autódromo Hermanos Rodríguez, donde la ficción y la historia del automovilismo mexicano se cruzan.